La empresa Emed Tartessus, filial de Emed Mining, que tiene proyectado abrir en 2008 de nuevo para la extracción de cobre las Minas de Ríotinto (Huelva), ha hecho las primeras gestiones para volver a ofrecer al turismo Corta Atalaya, la mina a cielo abierto más grande de Europa.
La empresa, según fuentes de la compañía, ya ha tomado contacto con la Fundación Riotinto, de forma que Corta Atalaya vuelva a formar parte del circuito de visitas turísticas de la comarca, solucionando la prohibición que existía sobre la misma hasta ahora, aunque todo está condicionado, precisamente, a la apertura de la mina.
Corta Atalaya es la explotación a cielo abierto más grande de Europa, con unas dimensiones de 1.200 metros de largo, 900 de ancho y 350 de profundidad, y fue uno de los proyectos más ambiciosos de la Río Tinto Company, en explotación hasta hace unos 20 años.
Junto a esta corta existía un pueblo llamado La Atalaya, fundado en 1883, que contaba con 257 edificios y 823 habitantes, pero en 1970 se aprobó la ampliación de la explotación de Corta Atalaya, lo que provocó un año más tarde la destrucción de este pueblo, que fue recreado en 2006 en el rodaje de la película 'El corazón de la tierra', de Antonio Cuadri.
Emed Mining prevé reabrir el yacimiento de Minas de Riotinto a mediados del año próximo si logra el permiso de la Junta y normaliza la situación legal de la empresa, con una inversión de 100 millones de euros en tres años y la previsión de extraer 40.000 toneladas de cobre anuales.
La mina permanece cerrada desde 2002, y según el proyecto presentado en su día en Riotinto por el director general de la filial española, Aristidis Anagnostaras, prevé ingresar como mínimo 150 millones anuales frente a un coste de explotación de 130, lo que arrojará unos beneficios brutos anuales de 20 millones, según los cálculos de la compañía.
Terra Actualidad - EFE